Periodoncia

La periodoncia es un campo de estudio que se ocupa de la prevención, diagnóstico y tratamiento
de enfermedades y condiciones que afectan a los tejidos que rodean los dientes y los implantes.
Existen dos grandes grupos de enfermedades periodontales: la gingivitis y la periodontitis. La
gingivitis es un proceso inflamatorio que afecta la encía del diente, causado por la acumulación
de placa bacteriana. Es reversible, pero es importante buscar atención si se observa sangrado al
cepillarse los dientes o al morder ciertos alimentos, ya que si no se trata, puede avanzar hacia la
periodontitis.

La periodontitis, también conocida como «piorrea», es una enfermedad inflamatoria crónica que
afecta tanto a la encía como al hueso de soporte de los dientes. Está causada por la acumulación
de sarro en pacientes genéticamente susceptibles. Si no se trata, puede provocar la pérdida de
los dientes debido a la falta de sujeción. Es fundamental buscar atención en una clínica
especializada lo antes posible, ya que el tratamiento puede detener la progresión de la pérdida
ósea y estabilizar la enfermedad, manteniendo los dientes. En casos de defectos óseos
específicos, se puede realizar una regeneración periodontal para recuperar el tejido de soporte
perdido.
La periodontitis es la etapa más grave de las enfermedades de las encías y, en sus fases iniciales,
rara vez causa dolor o presenta signos visibles. A medida que avanza, pueden aparecer síntomas
como sangrado, espacios entre los dientes, movilidad dental y retracción de las encías.
En cuanto a los tratamientos de periodoncia, incluyen:
• Educación en hábitos de higiene bucodental: Adoptar buenos hábitos de higiene oral es
fundamental para prevenir y controlar las enfermedades periodontales, así como las caries. Los
profesionales de nuestra clínica te brindarán información sobre las técnicas de cepillado
adecuadas para tu boca, previniendo este tipo de afecciones.
• Limpieza dental profesional: La limpieza dental profesional, también conocida como profilaxis
dental, es fundamental para evitar la formación de enfermedades periodontales.
Recomendamos realizar al menos una limpieza dental al año, durante la cual se eliminan las
bacterias acumuladas en las encías y se eliminan las manchas dentales, mejorando la estética
de la sonrisa.
• Estudio periodontal: Si presentas problemas en las encías, nuestro especialista en periodoncia
realizará un estudio para establecer un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento
individualizado.
• Raspado y alisado radicular: Este procedimiento, también conocido como «raspaje» o
«curetaje», consiste en la eliminación del sarro acumulado en las raíces de los dientes, por
debajo de la encía, que es el causante de la enfermedad.
• Cirugía periimplantaria: Al igual que los dientes, los implantes pueden sufrir de gingivitis,
conocida como «mucositis». Si notas sangrado al cepillar tus implantes o durante la
masticación, es importante que nos contactes. Si no se diagnostica y trata a tiempo, las
bacterias pueden afectar el hueso que sostiene los implantes, provocando la «periimplantitis».
Esta enfermedad debe ser tratada, ya que de lo contrario se puede perder el implante. En
algunos casos, puede ser necesaria una intervención quirúrgica para detener la pérdida ósea y
reparar el defecto causado por la infección.
• Mantenimiento de dientes e implantes: Es esencial realizar revisiones y limpiezas periódicas
tanto de los dientes como de los implantes para mantener su salud. En ocasiones, puede ser
necesario desmontar las prótesis para una limpieza más profunda. Las visitas al dentista no
deben detenerse después de la colocación de los implantes dentales, ya que requieren
cuidados especiales.
• Cirugía periodontal: En casos avanzados de periodontitis, el raspado y alisado radicular pueden
no ser suficientes, por lo que puede ser necesario recurrir a una cirugía para controlar la
infección. La cirugía periodontal permite eliminar el sarro subgingival y detener el progreso de la
enfermedad.
• Injerto de encía: Las recesiones gingivales, que consisten en la retracción de las encías, son
comunes en adultos. Esto expone las raíces de los dientes y puede causar problemas como
sensibilidad, cuestiones estéticas y molestias al cepillarse. El injerto de encía es una opción
para tratar este problema, cubriendo las raíces y mejorando la protección y apariencia de los
dientes.

• Alargamiento de corona: Algunas personas tienen una sonrisa gingival, en la que se muestra
demasiada encía y los dientes se ven cortos. En estos casos, se puede realizar un alargamiento
de corona, que implica recortar la encía para que se muestre más diente. Los resultados son
inmediatos.
• Frenectomía: En ocasiones, el frenillo puede ser más fuerte de lo normal y causar problemas
como separación entre los dientes, molestias al cepillarse y retracción de las encías. Con una
sencilla intervención quirúrgica, se puede eliminar el frenillo y solucionar estos problemas.
Si la enfermedad periodontal ha causado una pérdida significativa de hueso de soporte, los
dientes pueden terminar por caerse. Una vez diagnosticada la periodontitis, es fundamental
realizar un estudio periodontal lo antes posible. A través de un sondaje periodontal y radiografías,
se determinará el estado de las encías y se planificará el tratamiento más adecuado para tu caso.